Homilía sobre las diez vírgenes
Por último, en la tradición de cada Rito, tanto oriental como occidental, las estructuras y las formas de las celebraciones sagradas están de acuerdo con la Iglesia universal, también en lo que se refiere a los usos recibidos universalmente de la tradición apostólica ininterrumpida,
– 62. No es lícito omitir o cambiar arbitrariamente las lecturas bíblicas prescritas, ni especialmente sustituir “las lecturas y el salmo responsorial, que contienen la palabra de Dios, por otros textos escogidos fuera de la Biblia”.
– 114. “En las misas dominicales de la parroquia, como “comunidad eucarística”, es normal que se reúnan grupos, movimientos, asociaciones e incluso pequeñas comunidades religiosas”.
Cf. 1 Cor 11,26; Missale Romanum, Prex Eucharistica, acclamatio post consecrationem, p. 576; Juan Pablo II, Carta Encíclica Ecclesia de Eucharistia, 17 de abril de 2003, nn. 5, 11, 14, 18: AAS 95 (2003) pp. 436, 440-441, 442, 445.
Cf. Pío XII, Constitución Apostólica Sacramentum Ordinis, 30 de noviembre de 1947: AAS 40 (1948) p. 5; Congregación para la Doctrina de la Fe, Declaración Inter insigniores, 15 de octubre de 1976, parte IV: AAS 69 (1977) pp. 107-108; Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, Instrucción Varietates legitimae, n. 25: AAS 87 (1995) p. 298.
Parábola de las 5 vírgenes
2022, c. 112022, c. 11, art. 161.30.5. Se crea una comisión de directores, compuesta por el director nacional de protección de la juventud y cada uno de los directores de protección de la juventud.Cada miembro de la comisión designará a una persona que le represente en la comisión cuando no pueda participar.Los miembros de la comisión podrán solicitar la participación, con carácter ad hoc o permanente, de expertos u otras personas relacionadas con la protección de la juventud.
2022, c. 112022, c. 11, s. 161.SECCIÓN IDirector de Protección de Menores31. Se nombrará un director de protección de la juventud para cada institución que gestione un centro de protección de la infancia y la juventud; actuará bajo la autoridad directa del presidente y del director ejecutivo de la institución.
1984, c. 4, art. 14; 1992, c. 21, art. 217; 1994, c. 35, art. 18.31.3. El director velará por el mantenimiento, en el seno de la institución que gestione un centro de protección de la infancia y de la juventud, de prácticas y de una asignación de recursos que le permitan ejercer adecuadamente sus responsabilidades.El consejo de administración de la institución oirá trimestralmente al director para que le informe sobre el ejercicio de sus responsabilidades y el funcionamiento del centro de protección de la infancia y de la juventud.
Esta pobre viuda ha puesto más que todas las demás
“No. Se me cayó una piedra en la mano y creo que me he vuelto a romper el maldito dedo. Se me ha caído una piedra en la mano y creo que me he vuelto a romper el maldito dedo. Pensé que sería mejor ir a casa y que le echaras un vistazo. Eso era, pensé; me había dado un golpecito con la mano izquierda en vez de con la derecha.
Una vez más, llevé mi dedo a lo largo del suyo y luego lo tomé suavemente entre el pulgar y el índice, justo por debajo de la articulación distal. Podía sentir la grieta en mi mente, una delgada línea oscura de dolor.
“Ella lo adivinó. Brianna, no es culpa tuya. Nunca debes pensar que eres responsable de lo que te ha pasado”, dijo con firmeza. “Ven aquí, a leannan”. La levantó y la sentó torpemente en su regazo.
“No puedo casarme con nadie”, dijo con voz entrecortada. “No sería justo. No puedo aceptar a nadie más que a Roger, porque es a él a quien amo. Pero ahora no me quiere. Cuando se entere…”
“¿Te… te contó cómo sucedió? Quiero decir…” Contuvo la respiración con un profundo silbido. “¿Le hizo daño?” No podía verle la cara en la oscuridad, pero se notaba la vacilación en su voz.
Parábola de la viuda pobre
28 Por ejemplo, dos obras de 1887: Histoire de trois enfants courageux, de Berthe Flammarion (Marpon-Flammarion) y Les Enfants de Marcel, de G. Bruno (Belin); esta última obra reivindica enérgicamente los derechos de las mujeres y los niños.
44 La Joie de vivre, p. 865. Citaremos esta novela, y las demás novelas de los Rougon-Macquart, en la edición de Gallimard, “Bibl. de la Pléiade”. La Joie de vivre se encuentra en el volumen III. Para los demás, indicamos RM, seguido del volumen.
89 Véase Bernard Alluin, “Jean Barois et le genre du roman dialogué: l’invention d’un roman au “présent de l’indicatif”” en Le genre du roman, les genres de romans, obra colectiva, Université de Picardie, PUF, 1980, pp. 229-238.